Curiosidades: 10 bibliotecas del mundo que no puedes perderte
Ya sea por su larga tradición histórica o por su genial modernidad, estos centros del saber merecen un alto en nuestros viajes
Borges sintético, definió la importancia de las bibliotecas reconociéndose más en lo que había leído que en lo que había escrito. Cierto es que había cierta coquetería en lo que dijo; pero no es menos cierto que somos en gran medida por todo aquello que pudimos leer. ¿Y dónde mejor para encontrar lecturas que en las bibliotecas? Más si, como en esta selección, además encontramos tanta belleza.
Desde los tiempos remotos de las ciudades mesopotámicas, las bibliotecas se han considerado refugios de la cultura. Existen muchos tipos de bibliotecas: universitarias, escolares, públicas, nacionales o, entre otras, de investigación; pero sea como sea, en esencia, cada biblioteca es un artefacto cultural revolucionario. Mientras haya bibliotecas siempre habrá esperanza; mientras haya bibliotecas tendremos la oportunidad de encontrar aquel libro que nos cambie la vida, aquella frase que logre emocionarnos, aquel texto que nos explique la naturaleza o que haga preguntarnos por el universo. ¿Quién sabe cuántos viajes no habrán comenzando en una biblioteca?
Trinity College de Dublín
Esta es sin duda una de las bibliotecas más fotografiadas del mundo y lo es por su bella estructura de planta y sobreplanta de madera tapizada completamente por miles de libros. La biblioteca de la Universidad de Dublín posee la mayor colección de libros y manuscritos del país que se reparten en ocho edificios distintos. El edificio de la Antigua Biblioteca, construido entre 1712 y 1732, tiene en la Long Room su sala más destacada, con 65 metros de longitud. Allí se encuentra el Libro de Kells, la joya de la biblioteca, que contiene un texto en latín de los cuatro evangelios escritos con una caligrafía muy ornamentada, realizada con coloridos pigmentos. Visitar la Trinity College es un imprescindible de Dublín, una de las ciudades más literarias del mundo.
El Diamante Negro en Copenhague
La Biblioteca Real de Copenhague presume de ser una de las mayores de todos los países escandinavos. Entre los diferentes edificios que la albergan destaca esta joya de la arquitectura contemporánea: el llamado Diamante Negro. Se inauguró en 1999 y su ubicación en el frente marítimo de la capital danesa, la convierte también en un singular mirador hacia el canal de Christianshavn. Los tres puentes que la enlazan con el antiguo edificio de la biblioteca real y su estructura de acero negro diseñada por el estudio Schmidt, Hammer & Lassen son excepcionales y la han convertido en un auténtico icono de Copenhague que no deberías perderte. Por dentro, su interior es cálido, recubierto de madera y con amplias cristaleras por las que penetra la luz escandinava.
Biblioteca Pública de Estocolmo
Cuando se inauguró en 1928, cuatro años después de comenzarse su construcción, este edificio circular, obra de Erik Gunnar Asplund, uno de los arquitectos más prestigiosos de principios de siglo XX, Ya cautivó la atención del público por lo novedoso de la forma cilíndrica de su sala principal y por el nuevo concepto de estanterías abiertas que se adoptó por vez primera en Suecia. Asplund importó de Estados Unidos la libertad del usuario de tomar y reponer los libros sin necesidad de molestar al personal encargado del fondo. También diseñó los muebles de la biblioteca según su situación y uso. Está entre las calles Odengatan y Sveavägen y hoy sigue siendo una referencia que no puedes dejar de ver si visitas Estocolmo.
Nueva Biblioteca Alexandrina de Alejandría
En 1987 se inició el proyecto de construir una nueva biblioteca que recuperar la esencia y la ubicación de la mítica biblioteca de Alejandría, desaparecida 1.600 años atrás. Fue la biblioteca más grande del mundo y la primera que catalogó su fondo.El actual edificio que recupera aquel esplendor fue diseñado por el estudio de arquitectura noruego Snøhetta AS. Se eligió la forma de un enorme cilindro de cemento, cristal y granito, realizado con materiales traídos desde Asuán para el revestimiento de la fachada, dispuesta con bajorrelieves caligráficos de la mayoría de las lenguas del mundo. Simboliza el sol de Egipto iluminando al mundo. La nueva biblioteca, que se construyó con fondo de diversos países, está situada en el malecón de Alejandría, cerca del lugar donde se supone que se ubicó en su día la antigua.
biblioteca pública de Nueva York
Con tres millones de ejemplares, la biblioteca de Nueva York es la segunda más grande de Estados Unidos, tras la del Congreso situada en Washington DC. Su ubicación es magnífica, en pleno centro de Manhattan y nos resulta muy conocida dado que ha salido en multitud de películas. El edificio neoclasicista, obra de Carrére y Hanstings, data de 1911 y tiene una gran explanada flanqueada por las esculturas de dos leones que simbolizan la verdad y la belleza. De su valioso fondo destacan una Biblia de Gutenberg, una carta de 1493 de Cristóbal Colón, la primera edición de los manuscritos de Shakespeare, de 1623, el Bay Psalm Book de 1640 (primer libro inglés publicado en América), una copia manuscrita del discurso de despedida de George Washington, y un primer borrador de la Declaración de la Independencia de Jefferson. Desde una de sus vitrinas hay una perspectiva del Empire State, ¿te animas a encontrarla?
Biblioteca de la Universidad Humboldt en Berlín
La más antigua de las universidades de Berlín estrenó en 2009 su nueva biblioteca, la Jacob-Wilhem-Grimm-Zentrum, obra del arquitecto Max Dudler. El cuadriculado nuevo edificio sirvió para concentrar los fondos de diversos centros esparcidos por la ciudad (más de dos millones de ejemplares). Con una altura de 38 metros, el conjunto del edifiico está formado por una enorme celosía de madera y cristal que dota de luz natural la gran sala central distribuida en terrazas escalonadas. Esta flamante biblioteca se encuentra a escasa distancia de la Bebelplatz, la trístemente célebre plaza donde los nazis quemaban libros; así, que casi es un triunfo del destino.
Biblioteca Apostólica Vaticana (Ciudad del Vaticano)
Fundada por el papa Nicolás V en 1448, es una de las más antiguas bibliotecas del mundo y custodia una importantísima colección de textos históricos, entre los que destaca Codex Vaticanus (Códice Vaticano 1209), uno de los más antiguos manuscritos griegos de la Biblia, que se encuentra allí al menos desde el siglo XV. Está situada en las dependencias de los Museos Vaticanos, ricamente ornamentadas, y alberga también el Museo Sacro con objetos de arte medieval. Actualmente, la Biblioteca Vaticana está digitalizando su fondo a un ritmo estimado de 1.000 manuscritos al mes. ¡Y esperan acabar en el 2024!
Biblioteca Pública de Trømso
Situada más allá del Círculo Polar, a 350 km., se trata de una biblioteca excepcional por muchos motivos. Construida a escala humana en lo que fue el edificio del antiguo cine Fokus, la luz es el elemento primordial, con espacios para la reunión y la tertulia, los juegos infantiles y el estudio. Su techo parabólico es un verdadero icono de esta ciudad noruega. Algunas de las ubicaciones están estratégicamente situadas frente a maravillosas vistas para que disfrutes a la vez del paisaje y de la lectura.
Biblioteca de la Basílica de San Francisco (Lima)
Situada en el centro histórico de Lima, alberga unos 25 mil volúmenes entre los que se encuentran verdaderas joyas bibliográficas y ediciones raras, incunables y crónicas Franciscanas del siglo XV al XVIII, así como algunos tomos editados en las primeras épocas de la imprenta en el Perú. Su decoración barroca, que se mantiene igual desde la construcción del convento en 1546, es el escenario perfecto para comprender la trascendencia de su importantísimo fondo que también consta también de más de seis mil pergaminos.
Biblioteca Nacional de Praga
Desde hace más de dos siglos el magnífico complejo del Clementinum, situado a orillas del Moldava, alberga la Biblioteca Nacional. Una maravilla barrroca con un fondo impresionante, todo ello tamizado por la luz blanquecina de la sala y la sensación de estar en un lugar donde el saber está por encima de todo.