Por el valle de la Dordoña entre pueblitos con encanto y castillos medievales
BEYNAC-ET-CAZENAT
Beynac es uno de los pueblos más bonitos de Francia, cuya silueta está rematada por el castillo más emblemático de la región de Périgord (chateau-beynac.com), sobresaliente tanto por su emplazamiento como por su arquitectura e historia. Está literalmente colgado de las rocas, en un escarpado promontorio que domina el discurrir del río Dordoña. Antaño muy disputado entre ingleses y franceses, empinadas rampas llevan hasta lo más alto de la fortaleza, donde, tras cruzar su puente levadizo, hay que admirar los frescos góticos del oratorio, la cocina y, sobre todo, las vistas desde el torreón medieval.
CASTILLO DE MARQUEYSSAC
Desde Beynac-et-Cazenat comienza un recorrido muy bien señalizado que permite recorrer los mejores castillos de la región. El de Marqueyssac (marqueyssac.com) es la primera parada, donde además de admirar esta gran construcción del siglo XIX lo que más sorprende son los singulares jardines que lo rodean. Más de seis kilómetros de paseos donde crecen miles de bojs centenarios tallados a mano y acondicionados con miradores, rocallas, cascadas, teatros vegetales…
CASTILLO DE CASTELNAUD
La ruta prosigue a la búsqueda de los castillos de Fayrac y Des Milandes (milandes.com), una bella construcción renacentista de estilo italiano, hasta llegar al de Castelnaud (castelnaud.com). Rodeado de bosques, justo enfrente de Beynac-et-Cazenat y sobre un espolón rocoso en la confluencia de los ríos Céou y Dordoña, este restaurado castillo fue un importante baluarte inglés y es ejemplo perfecto de fortificación medieval. En la actualidad alberga una colección de armas y armaduras.
MONFORT
Entre Sarlat y Domme, está Montfort, un trío que forman parte de los pueblos más bonitos del Périgord. Sobre un meandro del río Dordoña se alza desde el siglo XIII en esta aldea rehabilitada del municipio de Vitrac un espectacular castillo privado digno de admirar.
DOMME
Un pequeño rodeo permite alcanzar la ciudad fortificada de Domme, que conserva el trazado de sus calles y el irregular trazado de las murallas que la protegían. Entre sus edificios de piedra destacan el Ayuntamiento o la Maison des Gouverneurs. No hay que perderse la visita a la cueva accesible desde la place de La Halle y la panorámica del Belvédère de La Barre, que domina el valle de la Dordoña.
LA ROQUE GAGEAC
El itinerario lleva hasta este acogedor pueblecito que parece acurrucarse bajo un escarpado acantilado. Sus casas de piedra de color ocre se amontonan, empujadas por las imponentes paredes de roca, sobre las callejas que llevan a la iglesia y al castillo llenas de tiendas de artesanía y tranquilos cafés. Para finalizar, lo mejor será darse un capricho y hacer un pequeño crucero en una de las gabarras tradicionales que navegan por el río entre los embarcaderos de La Roque y Beynac-et-Cazenat.
GUÍA PRÁCTICA
CÓMO LLEGAR
Beynac-et-Cazenac está a 371 kilómetros de Hendaya y a 410 de La Jonquera. Desde Hendaye llegar a Bordeaux, donde se enlaza con Beynac tras dejar atrás Bergerac. Desde La Jonquera tomar dirección Toulouse y seguir hacia el norte.
DÓNDE DORMIR
En Vitrac: Domaine de Rochebois (rochebois.com). Elegante palacio del siglo XIX de lujosa y cuidada decoración. Jardín, piscina y campo de golf de nueve hoyos. También tienen un recomendable restaurante con los mejores productos de la tierra.
En Le Buisson de Cadouin: Le Manoir de Bellerive (bellerivehotel.com). Casa de campo del siglo XIX con jardín estilo inglés. Cada una de las habitaciones es diferente tanto en tamaño como en decoración. Muy confortable. Su restaurante es uno de los más afamados de la zona.
DÓNDE COMER
En Domme: L’Esplanade (esplanade-perigord.com). Elegante comedor sobre el río Dordoña de generosa cocina clásica. También habitaciones con espectaculares vistas al valle.
En Vézac: Relais des Cinq Châteaux (relaisdes5chateaux.com). Moderna casa de estilo regional cuenta con dos comedores y una terraza con vistas a la campiña y a tres castillos.
