Turismo moderno
Otro de los grandes e impresionantes atractivos en la región de La Patagonia, es el Glaciar del Perito Moreno. Comparable con las cataratas del Iguazú en Brasil, se trata de una de las más imponentes bellezas naturales de Argentina. Enmarcadas en un paisaje espectacular, constituyen un polo de atracción para miles de turistas del mundo que llegan cada año para apreciarlas. El glaciar es sin duda uno de los más importantes de los trece que conforman el Parque Nacional de los Glaciares. Es una inmensa pared de hielo extendida sobre la región y a lo largo de un valle profundo y misterioso, un lugar mágico que parece diseñado para un cuento fantástico.
El frente posee más de 60 metros de altura y cubre 5 kilómetros de largo. En su recorrido esta mole de hielo atraviesa el Canal de los Témpanos y obstruye el drenaje del brazo Rico. Crea un tapón y por lo mismo, el nivel se eleva casi veinte metros por encima de su altura normal y las aguas contenidas ejercen gran presión para quebrar la muralla de hielo y desbordarse sobre el lago haciendo un enorme estruendo. La ruptura del bloque gigantesco de hielo genera un fenómeno natural sin precedentes. Los turistas tienen la suficiente paciencia para esperar con expectativa y durante muchos días, la hora en que se produce este impresionante espectáculo.
El Glaciar Perito Moreno tiene una historia particular, pues recibe su nombre de uno de los más insignes viajeros argentinos, Francisco Pascasio Moreno, quien recorrió gran parte de la Patagonia y en razón de su experiencia y conocimientos geográficos, fue nombrado perito para determinar los límites fronterizos con Chile. A modo de leyenda y como gran paradoja, Francisco Pascasio Moreno murió en 1919 pobre y olvidado. Injusto final en la vida de viajero tan importante, que dio nombre a la impactante masa de hielo que contribuye a crear una de las manifestaciones más hermosas de la naturaleza y que cualquier ojo humano puede contemplar y disfrutar.
Eduardo Osorio Lozano – Gerente General Fontur