Bangladesh: Desguezaderos de Barcos en la costa bangladesí.

En Bangladesh, hombres desesperados por un empleo realizan uno de los trabajos más peligrosos del mundo.

 

Esta imagen de satélite muestra un tramo de 1,6 kilómetros de litoral bangladesí justo al norte de Chittagong, donde se embarrancan y desmantelan barcos de todo el mundo. Se han talado 12 kilómetros de manglares para dejar sitio a las instalaciones de desguace, cada una de las cuales suele ocupar apenas el espacio suficiente para que quepa un barco grande. En esta costa hay actualmente unos 80 astilleros de desguace funcionando, y cada año aparecen más.

 

Estos operarios afirman tener 14 años, la edad mínima exigida por ley para trabajar en los astilleros de desguace. Los patronos prefieren trabajadores jóvenes porque salen baratos, conocen menos los peligros y con sus cuerpos pequeños pueden acceder a los lugares más difíciles de los barcos.

 

El acero del casco de los barcos se extrae en planchas que pueden pesar más de media tonelada cada una. Usando la fuerza bruta y unos rodillos improvisados, los porteadores las llevan a los camiones, que las transportan a las acerías, donde sirven para fabricar varillas destinadas a la construcción.

 

Los obreros pasan el día hundidos en el fango, contaminado por metales pesados y partículas tóxicas de pintura.

 

Unos trabajadores combaten el frío nocturno quemando una junta de tubería que probablemente contiene amianto.

 

Provistos de sopletes oxiacetilénicos y ayudados por sus asistentes, los cortadores desmontan primero el equipamiento del barco y después trocean las sucesivas cubiertas. El desguace completo puede llevar de tres a seis meses, dependiendo del tamaño del buque.

 

Después de que los trabajadores pasaran varios días cortando las cubiertas del Leona I, una voluminosa sección del buque se desprende de repente y levanta una nube de astillas de acero. Construido en Split, Croacia, el carguero navegó durante 30 años, más o menos la media de vida de estos barcos.

Deja una respuesta