Estados Unidos: Viaje por 3 carreteras míticas de América
El término road movie («película de carretera») viene de América. Por ese continente discurren rutas que constituyen un destino en sí mismas
Ruta 40, Argentina
La cordillera de los Andes sigue en paralelo el recorrido de la carretera más larga y emblemática de Argentina, inaugurada en 1935. A lo largo de 5.195 kilómetros, desde el Cabo Vírgenes (Patagonia) hasta La Quiaca (en el límite con Bolivia).
Ruta 40, Argentina
La Ruta Nacional 40 cruza 11 provincias, pasa por 21 parques naturales y asciende hasta los 5.000 metros. Lanzarse a recorrerla permite descubrir los paisajes más asombrosos del país. En su descenso desde el extremo norte de Argentina hacia el sur, esta larguísima carretera se escora hacia el oeste donde, cerca de la frontera con Chile, sus carriles pasan muy cerca del glaciar Perito Moreno, tanto que es obligatorio detenerse para visitarlo.
Transcanadiense
Casi 8.000 kilómetros (la distancia de Madrid a Kabul) separan las islas de Terranova y Vancouver y esta ruta los cubre sin abandonar Canadá. Avanzar rumbo al Pacífico permite evocar la época en que los pioneros del oeste dejaban atrás las ciudades de los Grandes Lagos para aventurarse por la llanura sin fin.
Transcanadiense
La apoteosis de la ruta son sus últimos 1.000 kilómetros, cuando atraviesa las Montañas Rocosas, con extraordinarios parques nacionales. En la imagen aparece el lago Moraine —en el Valle de los Diez Picos—, ubicado dentro del Parque Nacional Banff, en Alberta.
Ruta 66, EE.UU.
Cuando se acerca a la costa oeste es muy común encontrar paisajes áridos y desérticos como el de la imagen.
Ruta 66, EE.UU.
La literatura, la música y el cine han inmortalizado esta carretera interestatal que nació para unir las dos costas norteamericanas. Conocida como la «carretera madre», su apertura en 1926 fue un hito para el país. Para el viajero, resultan muy familiares establecimientos como este, que son lugar de paso de muchos protagonistas de películas míticas del cine estadounidense.