Portugal Hermoso destino de ultramar
Perteneciente a la Unión Europea, limita al este y al norte con España país con el cual comparte la península ibérica. Y con el océano Atlántico por el sur y el oeste. Portugal se extiende en los archipiélagos de Madeira y las Azores. La historia del nombre es particular. Proviene del antiguo nombre de la ciudad de Oporto en latín Portus-Galliae, que significa Puerto de Galicia en razón a que en sus viajes las naves de los galos pasaban por ese puerto de mar. Uno de los planes por excelencia en ese país peninsular es caminar por el sector histórico de las ciudades principales, Lisboa, Oporto, Sintra. La oferta cultural es amplia en espectáculos musicales, teatro, cine y artes plásticas. Este es uno de los países europeos con más alta demanda turística. Es ideal como destino para vacaciones, pues se pueden encontrar variados paisajes naturales, valles y planicies de verdes prados, modernas ciudades donde se presentan fuertes contrastes con sus construcciones antiguas, castillos, palacios, monasterios, iglesias y catedrales de estilos diversos, para que el turista las aprecie y las sienta. A su vez posee bellas playas frecuentadas por bañistas de todas partes. Portugal es un país para viajar de extremo a extremo y hacerlo en carro es un plan educativo y enriquecedor. Amigos de deportes náuticos pueden practicar windsurf, vela, esquí acuático. Más aventura se encuentra en un parapente que viaja con vientos favorables. En los ríos se practica rafting y otros turistas pueden dedicarse a la espeleología, descubrir las profundidades de la tierra en grutas inexploradas que son una experiencia indescriptible.
Lisboa
Caminar por los barrios tradicionales y entrar a un restaurante de comida mediterránea, es una experiencia para nunca olvidar. Varias visitas deben cumplirse para tener una idea global de lo que significa viajar a Portugal: los monumentos declarados Patrimonio Mundial por la Unesco como el Monasterio de Alcobaça, el Convento de Cristo y el Monasterio de Batalha, que forman parte de los escenarios más famosos de la historia portuguesa. El más antiguo es el Monasterio de Alcobaça, fundado por el primer rey de Portugal. En el Convento de Cristo aún se siente la mística de los caballeros templarios. Ubicado junto a un gran castillo construido en 1160 por esa Orden Militar para defensa y dominio del territorio conquistado en favor de los moros. Otro es el Monasterio de Batalha, de estilo gótico tardío, digno de apreciarse por su belleza y majestuosidad.
Uno de los barrios para visitar en Lisboa es La Alfama, caminar por verdaderos laberintos de calles angostas y empedradas, edificios viejos que son testimonio de culturas diferentes, el pintoresco tranvía 28 que avanza con su rugir monocorde y se desplaza sobre rieles centenarios en algunas calles empinadas, más bien callejuelas, donde el viajero puede deleitarse mirando la belleza de las casas, con sus balcones florecidos y la ropa tendida al sol.
Desde allí se ve el río Tajo cuando se une al Atlántico. Las tiendas pequeñas ofrecen variados artículos. Las calles de Miradouro de Santa Luzia o Castelo de São Jorge, son muy frecuentadas. También se encuentra en este encantador barrio, uno de los más visitados por los turistas, el Museo de Artes Decorativas, el Museo Militar, las Iglesias de São Vicente de Fora y Santa Engracia.
Vida Nocturna
La vida nocturna en ciudades de Portugal es vibrante, bulliciosa. En Lisboa, la capital, quizá es donde más bulle el ambiente animado. Los bares del Barrio Alto en Lisboa ofrecen a los visitantes ratos de nostalgia que se acompañan bien con deliciosos vinos portugueses, que valga la ocasión, están entre los mejores del mundo. Con sabor a puerto marino, Lisboa es un sueño para el turista amante de la vida nocturna. Desde allí se disfruta la vista la ciudad, el Panteón Nacional y La Catedral da Sé, entre otros lugares de interés. Variadas discotecas como las de la calle 24 de julio, reúnen a turistas amantes del baile. Abundan los restaurantes de exquisita gastronomía portuguesa y mediterránea, donde se puede comer pescado fresco, sopa de repollo y salchicha, jamón y el queso da Serra, tripas de Porto, se destacan los pescados, la langosta, cazuelas de mariscos y el frango na púcara, pollo en puchero de barro.
Oporto
Es la segunda ciudad más importante de Portugal, allí resulta un placer cultural conocer museos y monumentos antiguos, edificios de arquitectura medieval compartiendo por contraste con el estilo contemporáneo. Una de las mayores atracciones es caminar por los variados puentes, como el Ponte María Pía, que aún en desuso constituye un foco de atención. El Ponte do Infante y el Ponte das Barcas, el primero que atravesó el Duero, son verdaderas reliquias de la ciudad. Cerca de ellos existen edificios con apartamentos de alquiler durante unas vacaciones, ideales por su vista espectacular. Las vacaciones de verano en Oporto, con su fascinante historia, son una delicia. En la costa sobre el Atlántico, existe infraestructura turística con condominios y balnearios frente a playas de arena blanca y grandes olas como Playa Ilha de Tavira, Playa Ilha da Armona y Peniche, lugar famoso para los surfistas.
Transportes
El avión es el medio por excelencia para llegar a Portugal desde cualquier lugar del mundo. Existen aeropuertos internacionales en Lisboa, Faro, Porto, Funchal en la isla de Madeira y en las islas de São Miguel y Terceira en las Azores. Desde países cercanos existe el tren. En Portugal existe buen servicio de taxis y autobuses y alquiler de automóviles, que permiten movilizarse con mayor libertad y comodidad.